El viernes 3 de marzo a las 12 horas arrancará la movilización en Correos y finalizará frente a la sede del Gobierno regional en Peña Herbosa
ASAJA, Federación de Razas Cárnicas (Asociación de Criadores Raza Limousine, ABACAN, ASPICAN, ASEAMO Cantabria, La Socarreña, Asociación Nacional de Criadores de Raza Tudanca, Asociación Regional de Raza Monchina, Asociación Regional de Raza Charolesa, Asociación Parda de Montaña), AGAVACAN, AGAMOCAN, OVICAN, Asociación Ganaderos de Liébana, Asociación Vida Digna para la Ganadería y Ganaderos del Cantábrico convocan, oficialmente, el próximo viernes 3 de marzo una manifestación en defensa del mundo rural, donde se pedirá respeto a un colectivo clave en la cadena alimentaria y se reivindicarán unos puntos clave para el futuro del sector productor. El movimiento arrancará a las 12:00 horas en la Plaza de Correos y terminará frente a la sede del Gobierno de Cantabria en Peña Herbosa, donde se hará entrega de un manifiesto al presidente Miguel Ángel Revilla y al consejero de Medio Rural, Jesús Oria.
El malestar de las entidades convocantes se debe a que en las distintas reuniones que se han mantenido en la consejería de Medio Rural no se ha consensuado ninguna medida que flexibilice la problemática en Sanidad Animal y aún se arrastran las reivindicaciones, sin cumplir, que provocaron las concentraciones del pasado 2016. Ante esta situación, y agotadas las anteriores vías de comunicación, varias asociaciones ganaderas han decidido echarse a las calles para visibilizar sus problemas y solicitar su inmediata solución.
Una reivindicación general pero con seis puntos concretos
1º Incrementar el presupuesto en Sanidad Animal. La partida presupuestaria existente atenderá fundamentalmente a la alerta generada por el foco de brucelosis y por lo tanto disminuyen las ayudas a otras acciones fundamentales en materia de sanidad animal, por eso se pide un aumento de presupuesto. También se solicitan pruebas que den garantías de que las vacas estén enfermas y no sacrificar una cabaña ganadera entera por un positivo. Asimismo, una actualización de los baremos de indemnización para evitar la quiebra de los ganaderos que se vean afectados por algún positivo de tuberculosis, o de brucelosis, así como pagar las indemnizaciones en un plazo no superior a tres meses y no como hasta ahora: en ocho meses.
2º Incrementar el presupuesto para Planes de mejora y nuevas incorporaciones. Cada año 200 ganaderos solicitantes son denegados por falta de dotación presupuestaria. Esta partida es estratégica porque dinamiza el tejido social y económico de las zonas rurales, al favorecerse la inversión, la contratación y la sostenibilidad medioambiental. Así, se solicita el aumento de esta partida para que los núcleos rurales no sigan perdiendo activos y se genere empleo.
3º Recuperar el Plan de ayuda a la recría de novillas. Esta ayuda favorecía el circuito cerrado y además está vinculado con la sanidad animal. Criar los animales en Cantabria y no tener que adquirirlos en otras CCAA disminuye el riesgo sanitario.
4º Calendario de pago de las ayudas de la PAC. Se solicita nuevamente que se establezcan unas fechas de pago para que los profesionales del campo puedan administrar y organizar la viabilidad de su explotación.
5º Pago de las indemnizaciones por fauna salvaje y una solución al lobo. Los daños por fauna salvaje suponen un problema en las explotaciones, especialmente los de lobo. Se pide una solución y que se paguen todas las indemnizaciones en tiempo y forma en toda Cantabria.
6º Acotamientos al pastoreo por incendios. Muchos ganaderos ven como se criminaliza a todo un sector por los incendios, no siendo ellos responsables pero si los que pagan el delito. Los acotamientos de los pastos afectan en la declaración de hectáreas y a su vez en las percepciones de las ayudas de la PAC.
7º Plan de promoción de leche de Cantabria. En el año 2016 se ha perdido más de un centenar de ganaderías de leche en una Comunidad Autónoma que fue conocida por sus vacas de leche y que es una pieza clave como productor en la cornisa cantábrica.
Antecedentes
En el año 2016, distintas asociaciones y organizaciones agrarias organizaron una concentración exigiendo soluciones, donde se citaban los puntos críticos para el aporte de soluciones o medidas paliativas. Casi un año después, el campo continúa en situación de emergencia y pese a que sí se aumentó el presupuesto de la consejería de Medio Rural (uno de los puntos que se reivindicaron el 25 de abril de 2016) los 12 millones no se han destinado a ganadería, sino a otras partidas que, aunque tienen que ver indirectamente con el sector, no remedian sustancialmente los problemas de los ganaderos.
Hace casi un año de la concentración y reuniones, donde se vio una clara disposición del Ejecutivo Regional para dialogar y buscar una salida al problema de los profesionales del medio rural, pero actualmente y recién comenzado el nuevo ejercicio del 2017 algunos problemas enquistados siguen sin solución y tampoco existe dotación presupuestaria para su atajo, hecho que causará el cierre de más ganaderías.
Cantabria no se puede permitir perder a un colectivo que asienta poblaciones en una Comunidad Autónoma con más de un 80% de zonas rurales, además uno de los puntos estratégicos del Ministerio de Agricultura es evitar el despoblamiento en los pueblos. Por eso, uno de los ejes indiscutibles es mantener una viabilidad económica en estas zonas, donde el sector productor de Cantabria se asienta de manera permanente.