No es cierto, como afirma el comunicado del Gobierno regional, que el Ministerio de Hacienda haya aceptado las reivindicaciones formuladas desde la Consejería de Ganadería, Pesca y Desarrollo Rural del Gobierno de Cantabria para que el sector ganadero de la región se vea beneficiado en su declaración de la Renta de este año de una batería de minoraciones en la tributación que permitirán avanzar en el incremento de la renta media de las explotaciones. En todo caso Cantabria habría sido una más de las CC AA que presentaron la petición, aunque otras fuentes apuntan a que la medida partido de Hacienda y no de las regiones.
Lo que si es cierto es que Orden (HAP/596/2014), reduce para el período impositivo 2013 los índices de rendimiento neto aplicables en el método de estimación objetiva del Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas para las actividades agrícolas y ganaderas afectadas por diversas circunstancias excepcionales. De esta forma, el bovino de leche reduce el tipo de tributación del 0,32 actual al 0,26; además, en el caso del sector de las flores y plantas ornamentales, la rebaja es del 50%: del 0,32 al 0,16%, según informa el Ejecutivo autonómico. Pero esas reducciones ya eran conocidas pormlos ganaderos. La Orden Ministeria se firmo el 14 de abrirl y fue publicada en el BOC dos días después, el 16, es decir hace un mes.
La nota del Gobierno no explica por qué se difunde la noticia con un mes de retraso, aunque todo indica que se intenta vender como un éxito para inclufior en las eleciones del 25-. El comunciado si se extiende en otor tipo de explicciones como, por ejemplo, que Cantabria había solicitado además reducir los módulos en ovino, caprino, bovino extensivo y apicultura, si bien desde el Gobierno central se ha considerado que no han existido «suficientes circunstancias excepcionales» para generalizar la rebaja de tipos.
En el comunicaod del Gobierno la consejera de Ganadería, Blanca Martínez, declara las rebajas impositivas son una «excelente noticia» para el sector, en tanto que van a permitir que las explotaciones «dispongan aún de un mayor margen» con el que compensar eventuales incrementos de los costes de producción o, si acaso, con los que puedan abordar inversiones que permitan «ganar en competitividad».
Máxime cuando, recordó la consejera, otra Orden, la HAP/2549/2012, de 28 de noviembre, también establece en su Disposición adicional primera una reducción de un 5% del rendimiento neto calculado por el método de estimación objetiva para 2013.
«Se trata de una medida extraordinaria de carácter horizontal que afecta a la totalidad de los agricultores y ganaderos que tributen en estimación objetiva, cuyo efecto es, por tanto, mayor que cualquier reducción de módulos específicos», expuso Martínez, que insistió en la necesidad de «explorar nuevas vías de rebajas impositivas» para consolidar «la progresión del PIB y acelerar aún más la recuperación que está en curso».
«Desde la Administración debemos de ser capaces de implantar medidas que permitan a nuestros productores una rentas suficientes no sólo para mantener unos niveles de vida dignos, porque uno de los objetivos irrenunciables de este Gobierno es generar entornos de empleabilidad y servicio en las áreas rurales, sino que les permitan también reforzar la estructura de sus modelos de negocio y seguir creciendo. Las políticas normativas son importantes, pero las medidas fiscales son imprescindibles», abundó. Martínez insite en apuntarse un tanto que no la corresponde.